
Santa Catalina Mártir:
Cuando subí a la torre de Santa Catalina Mártir, era invierno, decidí subir por que vino a visitarme mi amiga Marina de Madrid y decidimos hacer turismo por el centro histórico de la ciudad de Valencia.
Nunca había subido, y pensé que seria una buena idea.
Cuando llegamos a la iglesia de Santa Catalina Mártir, me gusto, su sobriedad, no había entrado desde hacía años, que estuve en la boda de mi amiga Blanca, no la recordaba.
Parece románica pero es gótica y esta construida sobre una mezquita.
Tiene dos entradas una desde la plaza de Lope de Vega y otra desde la plaza de la Reina.
Recuerdo que subimos solas, con un precio de 2€ era temprano y no había mucho turismo.
Subimos los casi 100 escalones de barro, de una escalera de caracol que recorre la torre hasta llegar al campanario, (Su campanario es barroco) una vez llegas al final, tienes que salir al exterior por una trampilla y da paso a unas vistas espectaculares.



Subirse algunas azoteas
Subirse alguna azotea, es toda una experiencia, por lo menos para mi.
Las vistas de la ciudad, suelen ser espectaculares, es una sensación fluida, volátil y solo pienso que si tuviese alas, echaría a volar.
Aquí os muestro, un par de azoteas, del centro histórico de Valencia.
1. Primera:
Es desde la azotea del edificio donde vivo actualmente, la primera vez que subí, y no hace mucho, me lamente de no haberlo hecho antes fue una grata sorpresa me quede maravillada observando cada detalle de cada tejado.





Hay toda una fauna de entramados de terrazas, hilos eléctricos, chimeneas, torretas, campanarios de iglesias que se pueden observar tanto a lo lejos como a lo cerca
Y como no, alguna pareja de enamorados que se hablan al oído y festejan su amor.
En más de una ocasión, cuando me he sentido estresada en mi vida, subo a la azotea, me siento mirando el horizonte, y espero que el sol caiga poco a poco es una sensación muy placentera y relajante mientras escucho música y tomo una copa de vino tinto, mi mente desconecta y empiezo a soñar.
2. Segunda:
La segunda azotea que os quiero mostrar es desde casa de un familiar, y como podréis observar tiene unas vistas de la Plaza de la Virgen, que quitan el sentido.


Recomiendo , subirse algún campanario emblemático, torres, torretas, aunque sea un edificio moderno, por supuesto no hay que tener vértigo.
Cuando viajo intento subirme a todos los lugares que pueda observar, las ciudades desde arriba, es una sensación única para mi.
Igual tuve un antepasado ancestral ave ó algún tatarabuelo piloto, quien sabe!….
Me quedo con las sensaciones que me produce la mente y el estremecer del cuerpo cada vez que subo algunos metros hacia arriba.
@Pasaporte a mi vida Blog-2018